Los arreglos funerarios, aunque son un tema del que preferimos no hablar o por lo menos no hacerlo a menudo, requieren de atención a ciertos detalles como, por ejemplo, la escogencia de una lápida adecuada, que sea resistente y duradera, tomando en cuenta que estará a la intemperie.
Lo cierto es que existen lápidas de diferentes formas, tamaños y materiales, pero la gran interrogante es ¿qué tipo de lápida debe elegirse para que resista las pruebas del tiempo?
Materiales
Lo primero a considerar es que hay una gran cantidad de materiales con los que se pueden hacer las lápidas, algunos de estos serán muy accesibles y otros quizá no tanto.
Si bien es posible que desee la lápida más duradera posible, es posible que no sea la más accesible desde el punto de vista económico, pero afortunadamente existen diferentes opciones dependiendo de cada presupuesto.
Los materiales más habituales son cuarcita, granito, mármol, bronce, arenisca, hierro y pizarra. Si va a seleccionar un material por su longevidad, los tres materiales más comunes de mayor duración son la cuarcita, el granito y el mármol.
Grabado
Una vez que haya elegido un tipo de piedra, debe averiguar qué poner en ella. Esto se hace en tercer lugar porque será más fácil determinar qué estilos se verían mejor y se pueden hacer.
Luego, debe elegir qué texto e imágenes desea usar. Pero un factor importante a considerar es que cuanto más textos e imágenes tenga en la lápida, más rápido y más posibilidades tendrá de desgastarse.
Las dos opciones principales entre las que puede elegir son un diseño grabado con láser y el clásico diseño de corte profundo y pulido con chorro de arena. Ambos tienen sus aspectos positivos y negativos, pero el grabado con láser durará tanto como la piedra si se hace correctamente, mientras que el corte a mano puede durar mucho tiempo, pero eventualmente puede desvanecerse.
