Cuando se trata de hacer referencia a los nichos de alquiler temporal, es referirse al hecho de la muerte de una persona y la manera en que pueden ser guardados sus restos mortales.
Es decir, cuando una persona muere, se puede optar por dos formas de mantener su cuerpo, uno de estos es la realización de un entierro y sepelio como comúnmente se le llama y otra de las formas es realizarle la cremación.
Estas opciones son hechas ya sea a voluntad del propio fallecido antes de su deceso o por una decisión de los miembros de la familia. En ambos casos se requiere de un espacio para guardar las cenizas o el cuerpo entero.
¿Qué es un entierro o inhumación y cremación?
Un entierro o también llamado inhumación, consiste en un proceso tradicional, por así decirlo, en la que los restos de una persona se entierran. Generalmente, es lo que se ha realizado hasta los momentos, aunque son cada día más las personas que han optado por el otro método, el de la cremación.
Por su parte, cuando se refiere a la cremación hace relación al hecho de incinerar los restos físicos de una persona una vez haya muerto. Lo que resta del cuerpo, una vez se haya optado por este sistema, son las cenizas, las cuales son guardadas en un cajón pequeño y allí se mantienen.
En ambas opciones se requieren contar con un procedimiento especial, el cual se menciona a continuación.
Alquiler de un nicho
Es importante conocer aquello que se denomina un nicho. Este nicho funerario hace referencia a un lugar que se dispone para colocar los restos de una persona que se decide inhumarla o enterrarla.
Este sitio viene siendo un espacio o cavidad que se destina específicamente para alojar un ataúd que contiene los restos mortales de una persona.
Son muchas las personas que no poseen un espacio para enterrar a sus familiares, cuando sea el caso de que se quiera enterrar a un familiar y no se disponga de un nicho, se puede alquilar un nicho funerario por un determinado tiempo.
Este puede alquilarse por el tiempo que se desee, solo se debe cuadrar con el administrador del cementerio, el cual cuenta con nichos temporales de alquiler, los cuales pueden ser alquilados por un tiempo máximo de 5 años con opciones a ser renovado.
Alquilar un nicho es una alternativa bastante económica, considerando que aun muchas personas no disponen de un lugar propio para guardar los restos o simplemente no son precavidos por así decirlo.
Para ello es sumamente indagar en los camposantos la posibilidad que existe de tener un nicho propio o, por el contrario, uno alquilado.
No sin antes aclarar que los dueños de los nichos o mejor dicho, la titularidad queda exclusivamente ceñida al ayuntamiento que le corresponda, por lo tanto, es ante ellos que se deben hacer las diligencias respectivas.
Opciones para vender un nicho
Si una persona tiene la titularidad de un nicho en un camposanto y lo desea vender, no tiene problema alguno, para ello se hará necesario realizar un documento de propiedad (compra/venta) con una persona que se encuentre interesada y que desde luego no sea un familiar.
Este es una operación que se realiza claro está, comprobando que se cumplan todos los requisitos exigidos por el ayuntamiento y que no se viole ninguna norma al respecto. Una vez realizado este paso, el nicho pasará entonces a ser propiedad de otra persona.
¿Mantenimientos de los nichos?
Por supuesto que esto debe hacerse constantemente, el mantenimiento es algo común y que consiste en mantener en adecuadas condiciones el lugar donde se guardan los restos de nuestros familiares.
Este mantenimiento debe ser realizado por la misma familia del difunto, para ello el o los interesados deben ponerse de acuerdo con alguna de las empresas que se encargan de realizarle mantenimiento a los nichos.
Estos se encargan de mantener en adecuadas condiciones el lugar santo donde reposan los restos de una persona en un camposanto.
¿Puede usarse un nicho que ya había sido ocupado por otra persona?
Esto es una duda que puede llegar a tener muchas personas que tienen familiares en un determinado camposanto. Es relevante considerar el hecho de que los nichos se encuentran sujeto a un tiempo de concesión establecido entre las partes.
Queriendo decir con esto que el mismo tiene una fecha de inicio en la que se procede a enterrar el cuerpo de una persona que muere, hasta la finalización del mismo, el cual ocurre en el momento en que se procede a realizar la exhumación del cuerpo.
Cuando eso suceda, es necesario que los dueños del nicho decidan si se va a renovar el plazo de la utilización de dicho nicho, es decir, si se va a renovar la concesión, si se va a adquirir otra fosa en el camposanto o simplemente si se van a incinerar los restos de su familiar.
Las renovaciones de los niños suelen hacerse cada cierto tiempo, en este caso, ocurre cada diez años.
Inscripción para los nichos
Toca estar pendiente de las normas que se establecen en cada campo santo, con relación a la inscripción que se le pueden hacer a los nichos de los familiares.
Si el camposanto lo permite, lo ideal sería el contratar a una persona especialista en realizar lo que se denomina marmoleado, esto lo realiza un marmolista, este es la persona más idónea, puesto que conoce como se realiza el trabajo, además de que lo puede asesorar en cuanto a los procesos legales que se deben realizar para realizar la inscripción.
Es relevante considerar el hecho de que, para poder realizar este procedimiento, es necesario contar con una autorización otorgada por el organismo correspondiente.
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